Gracias Señor

 

1 Tesalonicenses 5:18  

Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.

Las gracias, del cual recibimos mandamiento de darlas a Dios se relaciona con la actitud que nace del corazón y se extiende a los actos en reconocimiento de la voluntad agradable y perfecta de Dios, es decir, no solo damos gracias cuando Dios responde a nuestros planes, sino que mayormente debemos dar gracias cuando los planes de Dios se cumplen aunque no nos agraden o no sean nuestros; 

Romanos 8:28  

Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas ayudan para bien, a los que son llamados conforme a su propósito.

La acción de gracias implica agradar a Dios en todo; en la forma de conducirnos en este mundo demostramos cuan agradecidos estamos de Dios; 

Filipenses 4:6 (DHH) 

No os aflijáis por nada, sino presentadlo todo a Dios en oración. Pedidle, y también dadle gracias.

La conducta del creyente conforme a la voluntad de Dios enseñada en su Palabra será la evidencia del nivel de agradecimiento que tenemos de Dios; 

1 Tesalonicenses 4:1  

Por lo demás, hermanos, os rogamos y exhortamos en el Señor Jesús, que de la manera que aprendisteis de nosotros cómo os conviene conduciros y agradar a Dios, así abundéis más y más.

El hacer, es una acción que involucra a la voluntad del hombre cuando lo que hace no es lo que quiere y sin embargo, lo lleva a cabo, por amor y obediencia, en este caso a Dios. Esto encierra la labor en una actitud de agradecimiento desde el principio hasta el final; 

Colosenses 3:17 

Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él.

Un corazón agradecido es un corazón transformado. El agradecimiento nos mueve a mantener actitudes de fe, las actitudes de fe son las actitudes más positivas en este mundo. Un corazón agradecido en todo tendrá contentamiento y agradará al Señor; 

1 Tesalonicenses 2:4  

sino que según fuimos aprobados por Dios para que se nos confiase el evangelio, así hablamos; no como para agradar a los hombres, sino a Dios, que prueba nuestros corazones.

¿Eres un creyente agradecido con Dios sólo con tus labios? En nuestra conducta está la verdadera evidencia de un corazón que lleva una vida de acción de gracias al Señor.

 

Pastor Heyvi Castillo